LA SIEMBRA ES SECANO comienza en el mes de septiembre, y puede prolongarse hasta noviembre, si no ha llovido.
El terreno a sembrar se divide en melgas, con el fin de que la semilla se distribuya de forma homogénea. El campesino coloca las semillas en el simentero y, con su mano, las esparce a voleo sobre la tierra seca.
La tierra sembrada se remueve con el arado para que las simientes queden cubiertas, a la espera del agua que las haga brotar.